jueves, 1 de junio de 2017

Introducción de las XO en el aula y su impacto en el rol docente

Hoy entré como todos los días y cuando fui a contarles lo que íbamos a hacer nadie me miraba, todos estaban con la computadora. Me pedían ayuda técnica pero en ningún momento escuché: ¿maestra, podemos abrir las máquinas?

A través del análisis de las conversaciones entre maestros en los recreos de una escuela durante el primer mes de implantación del Plan Ceibal este ensayo se propone observar qué aspectos del rol docente se vieron movilizados, a la luz de los aportes de autores que han investigando procesos similares en otros países.

Introducción
El Plan Ceibal tiene como uno de sus objetivos el uso innovador de las computadoras integrado a la cotidianeidad del aula. Plantea que el «uso con sentido de las tecnologías» permitirá diferentes formas de aprender y señala al maestro como pieza fundamental en la tarea de dar intencionalidad pedagógica al uso de las computadoras.

La introducción de las computadoras en el aula ha tenido un impacto inmediato en la tarea de los maestros. ¿Implica una redefinición del rol docente? A través del análisis de las conversaciones entre maestros en los recreos de una escuela durante el primer mes de implantación del Plan Ceibal este ensayo se propone observar qué aspectos del rol docente se vieron movilizados, a la luz de los aportes de autores que han investigado procesos similares en otros países.

Desarrollo
¿Transmisores o facilitadores?
«Dicen que con las computadoras el rol del docente debe dejar de ser el de transmisor para ser un facilitador. Yo creo que los que dicen eso hace mucho tiempo que no entran en una escuela, los maestros ya no somos como creen, ya no existe eso de dar la clase magistral, asumimos el rol de facilitadores hace rato» (maestra de cuarto año). Los maestros que no nos consideramos tradicionales pensábamos antes de la introducción de las computadoras en las aulas que estas no iban a cambiar nuestra práctica, que las íbamos a incorporar como herramientas útiles a nuestros fines, con facilidad y sin cuestionamientos.

Sin embargo, desde el primer día en que las computadoras estuvieron en la clase, un conjunto de prácticas establecidas por el uso, rutinas instaladas y hábitos naturalizados comenzaron a verse inadecuados. La reflexión conjunta, acotada a 15 minutos de recreo diario, nos ayudó a comenzar a comprender la razón de esos cambios y de los que vendrían.

El contrato didáctico
«Hoy entré como todos los días y cuando fui a contarles lo que íbamos a hacer nadie me miraba, todos estaban con la computadora. Me pedían ayuda técnica pero en ningún momento escuché: ¿maestra, podemos abrir las máquinas? » (maestra de tercer año).Uno de los aspectos que está instaurado en el contrato didáctico escolar es el hecho de que es el maestro quien comienza el encuentro del día indicando la actividad a realizar. En el caso que la maestra relata, los niños han cambiado las reglas del juego: cuando la maestra llega, la actividad ya ha comenzado y solo se le requiere para asesoramiento técnico. Hasta ese día el contrato didáctico ponía al docente como responsable de definir el tipo de actividad, la forma y el momento de iniciarla, desarrollarla y terminarla.

Esta forma de dirigir la actividad estaba naturalizada y no era cuestionada por los niños, ni por el docente. Pero encierra algunas explicaciones más complejas que una simple costumbre o rutina: en primer lugar, nos indica que los niños no saben qué van a hacer cada día en la escuela. Las propuestas son planteadas de manera unilateral, por lo que se enlentece o impide el desarrollo de actitudes de autonomía y habilidades de autogestión. También se aleja al niño de lo que realmente le interesa y tiene sentido. Esta anécdota permite mirar las rutinas instaladas en el contrato didáctico y cuestionarlas evaluando su vigencia, sus razones y su necesaria evolución. También fue posible atisbar un aspecto de la computadora que es el de adecuarse a los intereses de cada usuario que busca en ella lo que desea encontrar.

Gentileza ANEP. Uruguay
Mtra. Lic. Graciela Baratta

No hay comentarios.: